El valor de ser un profesional

Los compromisos y responsabilidades de nuestra cotidianeidad, pocas veces dejan espacio a la reflexión sobre nuestros actos. Sin embargo, en FAGDUT creemos en la importancia de pensar lo que hacemos y repensar por qué lo hacemos. Lejos de ser una cuestión meramente teórica o intelectual, considerar los valores que rigen nuestro accionar es una parte esencial de la actividad docente.

Sobre fines del 2013, celebrando el cierre de ciclo junto a los alumnos de nuestras licenciaturas, diplomaturas y cursos; se presentó una ocasión para colectivizar este ejercicio de permanente autoevaluación. En ese marco, el director del Instituto, Psicólogo Eduardo Marostica, señaló que “el 6 de agosto se recibía de contadora Elvira, una de nuestras compañeras de trabajo. Ella comenzó a trabajar en FAGDUT con 18 años apenas cumplidos. Ese mismo día, se produjo la fatídica explosión de calle Salta, que afectó también a docentes de nuestra Facultad en Rosario y, en medio de la desesperación de los familiares buscando y esperando alguna noticia sobre sus seres queridos, me encontré con un compañero de acá, de esta Licenciatura, que estuvo trabajando a destajo.” Se trata de Gerardo Princivalle, Bombero Voluntario y alumno del ciclo de licenciatura en Higiene y Seguridad, quien trabajó en el lugar de la explosión, poniendo en riesgo su propia vida.

En compañía de Gerardo -visiblemente emocionado por el sostenido aplauso de sus compañeros del Instituto- el director del Instituto FAGDUT señaló que “un profesional no puede serlo en toda su jerarquía, si no tiene valores éticos, morales y desarrolla el sentido de la solidaridad. Sin eso, somos solamente técnicos, personas que trabajamos y hacemos lo nuestro; pero hay algo más que podemos aportar”.

Por su parte, Gerardo compartió su experiencia. “Lo primero que quiero hacer es agradecer a mi familia, porque los dejé solos, sabiendo que se me podía colapsar una estructura encima; pero bueno, uno lo hace y lo sigue haciendo por toda la ciudad de Rosario - y agregó con la voz entrecortada- Cuando nos necesiten, ahí vamos a estar, siempre”. Y concluyó: “muchas gracias a todos, la verdad que no me lo esperaba, estos son los reconocimientos más lindos que uno puede vivir”.

Entendemos que de eso se trata ser un profesional; su dimensión humana y valor social no tienen que ver con diplomas ni pergaminos, sino con la calidez de quien sabe valorar las cosas simples y sostener con sus actos lo que dice con palabras. En Instituto FAGDUT estamos orgullosos de permitirnos valorar el tiempo compartido con profesionales como Gerardo y seguimos apostando a una capacitación acorde a las exigencias de nuestros tiempos.